La provincia de Formosa se enfrenta, cada año, a una de las problemáticas más desafiantes en la gestión ambiental y social: los incendios rurales durante las épocas de sequía; combinado con las altas temperaturas puede ser muy peligroso y preocupante para la comunidad.
El cuerpo de Bomberos ha intervenido en 71 incendios de pastizales en lo que va de enero, en su mayoría ocurrieron en la capital.
El Servicio Meteorológico Nacional emitió el lunes una alerta amarilla por el calor extremo para al menos 14 provincias, entre ellas Formosa, Chaco, Misiones y Salta, donde las temperaturas podrían superar los 39°C, con sensaciones térmicas que superan los 40°C. Estas temperaturas extremas favorecen la propagación de incendios rurales.
Los incendios representan una amenaza significativa para el medio ambiente, la salud de las personas y también para la infraestructura eléctrica de la región.
En este contexto, el cuerpo de Bomberos de la Policía de Formosa ha intervenido en 71 incendios de pastizales en lo que va del mes de enero, de los cuales la mayoría ocurrieron en la capital.
Los incendios, alimentados por la quema de pastizales y la sequedad provocada por el calor extremo, representan una amenaza significativa para el medio ambiente, la salud de las personas y también para la infraestructura eléctrica de la región.
Así lo afirmó en una entrevista el comisario mayor, Ramón Sergio Almirón, al expresar que los incendios pueden propagarse rápidamente por los vientos fuertes y las altas temperaturas que están pronosticadas para los próximos días, poniendo en peligro la vida de las personas, los recursos naturales y reduciendo la visibilidad en las rutas. Además, afectan las infraestructuras eléctricas, como postes de energía, líneas eléctricas y transformadores de distribución de la zona provocando cortes de energías y afectado a los usuarios.
Impacto ambiental
Los incendios rurales afectan directamente los ecosistemas locales. La pérdida de biodiversidad es uno de los efectos más graves, ya que miles de hectáreas de montes y pastizales quedan arrasadas por el fuego, dejando a especies animales sin hábitat y alterando cadenas alimenticias enteras. Además, las emisiones de gases de efecto invernadero aumentan considerablemente, contribuyendo al cambio climático global. Las cenizas y los restos de vegetación quemada también pueden contaminar cuerpos de agua cercanos, afectando tanto la flora y fauna acuática como el suministro de agua para las comunidades locales.
Consecuencias en la salud
El humo generado por los incendios es altamente perjudicial para la salud humana. Las pequeñas partículas en suspensión pueden causar problemas respiratorios, especialmente en personas vulnerables como niños, ancianos y aquellos con enfermedades pulmonares preexistentes. También se han reportado casos de irritación ocular y problemas cardiovasculares debido a la exposición prolongada al aire contaminado.
Riesgo para la red eléctrica
Un aspecto menos conocido, pero igualmente preocupante, es el impacto de los incendios rurales en la red eléctrica de la provincia. Las altas temperaturas y el humo pueden generar cortocircuitos en las líneas de transmisión. Además, cuando el fuego alcanza postes, líneas eléctricas rurales y transformadores de distribución y en varios casos a redes de alta, media y baja tensión, el suministro de energía se ve interrumpido, afectando tanto a los hogares como a las actividades productivas y comerciales.
Desde Defensa Civil se recomienda tomar todas las precauciones pertinentes para evitarlos. Algunas son:
- Mantener libres de vegetación perímetros de las viviendas, alambrados, instalaciones, vehículos, herramientas, etcétera.
- Realizar corta fuegos.
- Evitar arrojar materiales encendidos o inflamables.
- Evitar la quema de basura.
- Controlar permanentemente si se presentan focos de incendios.
- Informar la presencia de focos de incendios lo antes posible.
- Si se le presenta un foco de incendio no intentar apagarlo solo; informarlo y controlar la evolución.
- Bajo ningún punto de vista iniciar focos de incendio.
Un pequeño descuido podría tener consecuencias devastadoras para la comunidad, como se ha evidenciado en las recientes intervenciones y situaciones ocurridas en la región. Puede comunicarse con:
- 911 : Policía
- 100 : Bomberos
- 103 : Defensa Civil
- 0810 888 3333 : Guardia de REFSA
Desde la distribuidora de energía provincial se solicita la colaboración de la comunidad para denunciar este tipo de maniobras, que en su mayoría son intencionales. Las distintas autoridades instan a la población a tomar conciencia sobre la peligrosidad de encender fuego en áreas rurales y a evitar las quemas deliberadas, las cuales están prohibidas por ley.
La participación activa de la ciudadanía es esencial para proteger la infraestructura eléctrica, preservar el medio ambiente y garantizar la seguridad de las familias formoseñas. Cuidar nuestro entorno es responsabilidad de todos.